Víctor de Currea-Lugo | 8 de febrero de 2025
Estas son caras de Alepo, Homs, Hama, Latakia, Selma y Damasco, rostros de Siria. Sonríen y eso no quiere decir que no vaya una procesión por dentro. Sus sonrisas fueron auténticas, tanto como sus dolores y sus miedos, que no conocemos.
Las tomé durante enero de 2025, con frío, en medio de esperanzas e incertidumbres, y noticias que iban y venían. Son sirios, algunos suníes, alawíes, no sé si haya cristianos ni kurdos en las fotos, porque no siempre lo pregunté.
Hay desplazados que retornan, hay militares, hay palestinos refugiados. Doy fe de esas fotos; difícil saber todo su pasado y tampoco puedo precisar el futuro de esas personas. Les comparto las imágenes sin más deseo que el de contarles que hay un pueblo sirio que merece mejor suerte.
